Todas sabemos que es, pero no siempre disfrutamos de ella. Debemos sentirnos bien con nosotras mismas y, aunque tú lo creas, no depende de nadie más. Tú eres la única que decide cuando y como te sientes.
Ninguna somos perfectas ¿y? Tienes unos o muchos kilos de más, demasiado delgada, tus pechos no se separan ni un centímetro del tórax, tu nariz te asemeja a un Cyrano feminizado, pies raros, cartucheras más que visibles o, simplemente, tus facciones no son simétricas como deberían. No pasa nada.
Afortunadamente, en la variedad está el gusto. A unos les gustan delgadas, a otros con curvas o muy rellenas. Puede que no tengas las piernas más bonitas del mundo, pero sí un pelo precioso o unos ojazos que levantan pasiones.
En los realities descubrimos mujeres que, tras un cambio radical de look, son más atractivas. Aunque el maquillaje, la ropa, hasta un buen corte de pelo hace milagros, el verdadero cambio es su autoestima. Están más seguras de sí mismas y sonríen, son más guapas porque se sienten más guapas y proyectan una energía positiva. Si deseas que los demás te acepten y quieran por como eres, empieza a hacerlo tú. Coge las riendas de tu vida, no te dejes llevar. Citando un conocido programa de T.V. diré que Tú sí que vales.
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